martes

Cuando empezamos a cambiar, no puedo entenderte todavía, me duele aceptar que para tí, todo es irreal, superfluo, compartimos mucho, yo aprendi de ti, pero ahora que lo pienso me resulta egoista compadecerme de ti y de mi.
Compartimos muchos ideales, nos diferenciamos por otros mas, a final de cuentas eso basto para que te comportaras asi. Cobarde me resulta ya que no eres capaz de mirarme a los ojos y decirme lo que piensas de mí, no se me hace justo que te comportes tan ruin, la gente te llega a querer, y se aleja porque se harta de tí, unos pueden compadecerte pero otros llegan a fastidiarse. Tu que tanto criticas la moral y la etica absurda de la gente que te rodea y no eres capaz de formar la tuya propia, te conviertes en el verdugo de la gente que hace cosas que tu no te atreves a hacer, que buena forma de callar tus temores.
Me duele tu indiferencia pero me tranquiliza saber que yo no me quedare estancada compadeciendome de la vida, estare en un mundo donde tus ataques pseudomorales y sinceros no sean mas que estupideces ironicas.
Monton de mascaras utilizas, pero la diferencia entre tu y nosotros es que aceptamos lo que somos sin tapujos, no tratamos de ser gente objetiva y frivola, simplemente sentimos las cosas que te has negado a sentir, simplemente vete a la chingada, pero antes di las cosas de frente y acepta lo que eres, o mas bien en lo que te has convertido.

No hay comentarios.: