2 de Noviembre, día de los Santos Difuntos. En casa me enseñaron a esperar con gusto, recordar a los que ya no estan, a sentir su presencia. Estos dias me recuerdan mi infancia, cuando pasaba el día con mi abuelita, cierro los ojos y siento el calor de las velas, oigo la voz de mi ma fran, el olor de la comida. Cuando murio, mi mamá y yo prometimos que no faltaria una luz que los guiara y agua que calmara su sed. Por falta de espacio, ya no es del mismo tamaño que antes, ahora tratamos de que tenga todo lo que les gustaba.

Veladoras de agua y aceite, dulces, agua, calaberas, figurillas de azucar, camote, camotillo, camote morado, calabaza en tacha, pan, vino, cigarros,fruta, flores,y la imagen de un santo al cual nos encomendaron, eso es lo que me enseñaron a poner en una ofrenda. Tal vez es una de las pocas cosas que me nutren y me recuerdan de donde vengo.