Ya no quiero seguir pensando las pendejadas que salen de mi enferma mente, simplemente quisiera saber como hacer para que nada me haga sentir mal. Quizá las hormonas me estén jugando una muy muy muy mala broma o tal vez mi mente enferma de nuevo este changándome.

No quiero ser la servicial, la comprensiva, la callada, quiero gritar al por mayor, que esa persona sepa que me molesta su actitud, que no quiero ser el bulto que esta ahí para hacer lo que se necesita, quiero vivir mi propia vida, sin tener que cargar el maldito fantasma de sus decisiones, y al igual yo tengo que reclamar la falta de atención, el desinterés, las etiquetas que por sus comentarios han puesto en mi vida. Yo no pedí que tomara un papel que no le corresponde, nunca le pedí protección, ella sola lo quiso de esa manera, el reproche constante de la vida que llevo, el porque del apoyo que me dan, y de lo que tengo. Pero muy dentro de mí esta marcado que para otras personas soy una mercancía a la que pudo dejar y después de muchos años y en la agonía de alguien prometió regresar para comprar una vida, MI VIDA!!!!!!!!!!!

Y como es costumbre me culpa de no estar aquí, pero yo seria capaz de irme con tal de que regrese, si en algún momento pensé hacerlo, ahora después de todo lo que ha pasado y el hacerme sentir, como de costumbre, un estorbo en su vida, ni madres, no se la voy a dejar tan fácil, ya no soy la pendeja que todo estaba dispuesta hacer, se va a tener que chingar, enfrentarse a mi, y demostrarme si es mas cabrona que yo. Es difícil aceptar y entender el que mi familia me diga que esperaba que yo llevara la vida que esa persona esta viviendo, me duele en demasía, sea pues que para ellos yo era y siempre fui, la niña pendeja a la que tendrían que sacar de los problemas. Orgullosamente, sin pensarlo he demostrado que los papeles se cambiaron.